VALENTINE.

El poco disimulado afán de construir una película de suspense con la intención de lanzar al mercado nuevos actores y actrices se dibuja con estridencia en este film dirigido en 2001 por Jamie Blanks. Puede reconocerse que a la hora de sobresaltar al espectador con golpes de efecto, Blanks logra cierta eficacia. Incluso la presencia de la sibilina Denise Richards en el rol de Paige Prescott da al conjunto cierta consistencia. Sin embargo cuando los fotogramas terminan, queda el regusto típico de esta familia de películas : un malvado psicópata que no se descubre hasta el final, muchas sospechas durante el recorrido de la historia y rostros femeninos muy plásticos que endulzan al cliente masculino. También la presencia del apuesto actor newyorkino David Boreanaz (Adam Carr) sirve para mantener ocupadas a las espectadoras más exigentes.
Blanks introduce algunas escenas dedicadas a ensalzar la anatomía de Richards y a presentar en sociedad a la actriz Katherine Heigl (Shelley Fisher en la película), mostrándose un tanto torpe en el desenlace.
Paquete decorado y envuelto en celofán de colores, con más bien escaso contenido.
No pasará a la historia por meritos propios.

VALENTINE (2001). Director : Jamie Blanks. Guión : Donna Powers, Wayne Powers, Aaron Harberts y Gretchen J.Berg, basado en una novela de Tom Savage. Música : Don Davis. Montaje : Steve Mirkovich. Fotografía : Rick Bota. Producción : Dylan Sellers. Intérpretes : Denise Richards, David Boreanaz, Katherine Heigl, Marley Shelton, Jessica Capshaw, Jessica Cauffiel y Fulvio Cecere. 96´Color. EE.UU. Warner Bros Pictures-Village Roadshow Pictures-NPV Entertainment-Cupid Productions.
Fotografía : Denise Richards (Paige), todo esplendor.