HEARTBREAKERS.

Madre e hija, Max (Sigourney Weaver) y Page (Jennifer Lowe Hewitt) Conners; dedican su modus vivendi a estafar a ricos solteros engatusándoles por medio de sus encantos. La madre se casa, la hija se mete por medio y el pardillo termina pagando, divorcio al canto; ingentes sumas de dinero en forma de pensión compensatoria, probada la infidelidad. Comedia de baja intensidad, dirigida por el norteamericano David Mirkin, que incide en las personalidades pícaras de ambas mujeres, dos supervivientes caricatas.
Lo que le falta a Heartbreakers es una buena dosis de continuidad en el guión, resultando un film demasiado extenso para la historia narrada. Weaver se muestra encantadora, sensual a ratos; desarrollando un personaje gracioso, perverso en algunos instantes; que despliega un arsenal de guiños muy atractivos en la retina del espectador. Lowe Hewitt, más simple que Weaver; intenta nadar a su altura, aunque a ratos se ahoga.
Destacable la actuación de Gene Hackman, caracterizado como un millonario tabaquero; cuyas toses y esputos exageran el retrato que nos traslada. Flojito Ray Liotta, poco consistente en su figura comediante.
Una película que fracasa por la debilidad de la historia y cuyo único aliciente consiste en el esfuerzo de la actriz newyorkina Sigourney Weaver, francamente acertada.

HEARTBREAKERS (2001). Director : David Mirkin. Guión : Stephen Mazur, Paul Guay y Robert Dunn. Música : John Debney y Emmanuel Kiriakou. Fotografía : Dean Semler. Montaje : William Steinkamp. Intérpretes : Sigourney Weaver, Jennifer Lowe Hewitt, Ray Liotta, Anne Bancroft, Jeffrey Jones, Jason Lee, Nora Dunn. 123´Color. EE.UU. Davis Entertainment-Metro Goldwyn Mayer.
Fotografía : Sigourney Weaver y Jennifer Lowe Hewitt, dos pícaras de cuidado.