INFESTATION.

Puestos a rodar una película sobre una invasión de insectos voladores de gran tamaño que adormecen a sus víctimas humanas rodeándoles de una manta de pupa, para luego chuparles la sangre, hasta convertirles en una extraña mutación entre arácnida y humana, al menos se puede exigir un mínimo de originalidad. El film de Kyle Rankin adolece de frescura, repitiendo los tópicos del género, hasta convertirse en una historia ramplona. ¿Quién dijo que ya no se estrenan films serie B?. Infestation lo es. Su estructura es tan simple que sobran comentarios. Muchos efectos especiales vía digital y la sensación de estar perdiendo el tiempo motivan que el espectador desee alcanzar el desenlace final, que, por cierto; cuando llega, sirve como certificación plena de que lo visto responde más a un cuento escabroso que a un film con garantía fantasiosa.
El actor Chris Marquette interpreta a Cooper, un antihéroe de corto recorrido, metido a salvador de la humanidad por exigencias del guión.
A su lado, la astuta Sara, (ajustado trabajo de la actriz canadiense Brooke Nevin) y una rubia melosa y asustadiza, Cindy; dibujada por la actriz californiana Kinsey Packard.
En fin, ni siquiera los efectos, que abundan a diestro y siniestro; merecen un aplauso.
Muy pobre.

INFESTATION (2009). Dirección y guión : Kyle Rankin. Montaje : David Finfer. Fotografía : Thomas E.Ackerman. Música : Steven Gutheinz. Intérpretes : Chris Marquette, Brooke Nevin, Kinsey Packard, E.Quincy Sloan, Ray Wise, Linda Park, Bru Muller y Deborah Geffner. 91´Color. EE.UU. Icon Productions-Heavy Duty Entertainment.
Fotografía : Cindy (Kinsey Packard), acosada por el terror.